Apple Inc. es una empresa estadounidense de tecnología informática. Fundada en 1976 tuvo un rol prominente en la revolución informática de los años 70 con su ordenador Apple II. Sus inicios son poco menos que curiosos, y forman parte del folklore informático. Tanto Steve Jobs como Steve Wozniak eran dos grandes aficionados a la electrónica en general y a la informática en particular, en especial Wozniak. Este, desde pequeño, dedicaba sus ratos libres a idear complejos circuitos electrónicos para después optimizarlos al máximo. De esta afición, surgió su primer ordenador, el Apple I, el cual fue presentado en la Homebrew Computer Club. Aunque para Wozniak la construcción de ordenadores no era más que un simple hobby, Jobs rápidamente vio la oportunidad de negocio, por lo que empezó a promocionar el ordenador entre otros aficionados de la informática del Homebrew Computer Club y otras tiendas de electrónica digital.
Pronto empezaron pequeños encargos que resolvían ellos mismos con máquinas hechas a mano, llegando a vender unos 200 Apple I. Se les unieron más amigos, pero las prestaciones del Apple I eran limitadas, así que empezaron a buscar financiación. Finalmente Jobs conoció a Mike Markkula, que accedió a invertir, creándose así el 1 de abril de 1976 Apple Computer.
Con estos nuevos ingresos diseñaron el Apple II, marcando un hito en su momento y definiendo lo que debía ser un ordenador personal en aquella época. Cuando en 1980 la compañía se abrió al publico ganaron millones en días con su Apple II family. Se desarrolló el Apple III, pero para 1983 los diseñadores estaban pensando en una revolucionaria forma de ordenador, un nuevo concepto, un ordenador con una interfaz gráfica, ratón e iconos; el ordenador como lo conocemos en la actualidad. La empresa se dio cuenta de que el futuro estaba en la creación de un interfaz gráfico más sencillo y accesible para el usuario, es decir, los interfaces gráficos que poco a poco empezaban a salir de los laboratorios para intentar colarse en ordenadores comerciales. Tras la salida del primer IBM PC en 1981 Apple comprendió que necesitaba un golpe de efecto para recuperar la delantera en el mundo de la informática personal, y su gran apuesta y esperanza era el Apple Lisa, el segundo ordenador comercial salido al mercado después del Xerox Star.
Pese a ser un ordenador muy superior a todo lo que había en su momento, también lo era su precio, por lo que las ventas del Lisa nunca fueron muy grandes. Apple sólo era sostenida por las aún fuertes ventas de su obsoleto Apple II, por lo que se volcó en su en principio olvidado pequeño proyecto de Jeff Raskin primero y Steve Jobs después: el Apple Macintosh.
Ahí Jobs comprendió que Apple tendría que convertirse en una compañía madura, y que él no era el hombre adecuado para ese trabajo. A principios de 1983, Jobs comenzó a hablar de negocios con John Sculley, en aquel entonces presidente de Pepsi-Cola. En abril lo convenció y Sculley se convirtió en el presidente ejecutivo (CEO, Chief Executive Officer) de Apple. Si bien era un hombre de negocios exitoso, pronto se hizo evidente que Sculley no sabía gran cosa de la industria informática. Casi de inmediato, él y Jobs estuvieron en desacuerdo. Como faltaba cada vez menos para el lanzamiento del Macintosh, Jobs aumentó su ritmo de trabajo. Buscó sin descanso desarrolladores que programaran para la máquina a punto de salir, porque Jobs creía que la industria del software, en última instancia, haría funcionar o no al Mac.
El 22 de enero de 1984, en el tercer cuarto del Super Bowl (la gran final del football americano), Apple lanzó el famoso aviso comercial de presentación de la Macintosh. Dirigido por Ridley Scott, la escena, de características orwellianas, describía cómo el mundo de IBM era destruido por una nueva máquina. Al principio, el Mac se vendió muy bien, pero para las Navidades la gente ya se quejaba por la poca memoria RAM y la imposibilidad de conectarla a un disco rígido.Fue a comienzos de 1985 cuando Jobs y Sculley comenzaron a discutir. Sculley creía que Jobs era peligroso y que estaba fuera de control; Jobs creía que Sculley no sabía nada de la industria informática y que no hacía ningún esfuerzo por aprender. En mayo Jobs decidió hacer una jugada para tomar el control de la compañía. Le propuso a Sculley que programara una reunión en China y planeó un golpe en el directorio para cuando Sculley estuviera de viaje. A último momento alguien le hizo llegar esta información a Sculley, que decidió enfrentar a Jobs. Luego de una acalorada discusión entre ambos, la Junta Directiva votó y se colocó unánimemente del lado de Sculley. Jobs renunció ese mismo día, dejando a Sculley a cargo de Apple.Sculley se convirtió de hecho en la cabeza de Apple en mayo de 1985. En los meses posteriores, la empresa se vio forzada a despedir a un quinto de su fuerza laboral, alrededor de 1200 empleados. Apple también anunció su primer trimestre fiscal con pérdidas. Todo esto, más la renuncia de Jobs, sirvió para que se fuera perdiendo la confianza en la capacidad de Sculley para ser el CEO de Apple.Al mismo tiempo, Sculley puso todo su empeñó en una batalla judicial contra Bill Gates, de Microsoft, por la introducción del Windows 1.0, que era muy similar a la GUI (siglas de Graphical User Interface, Interfaz Gráfica de Usuario) del Mac. Gates, finalmente, acordó firmar una declaración por la que Microsoft se comprometía a no usar tecnología del Mac en Windows 1.0, pero nada se decía allí sobre las futuras versiones de Windows, y los abogados de Gates se aseguraron que esta argucia fuera a prueba de fallas. Apple había perdido, efectivamente, los derechos exclusivos sobre su diseño de interfaz. Este documento llegaría a ser importante en los juicios posteriores entre Apple y Microsoft, que trataran sobre la interfaz del Windows.La introducción simultánea de la LaserWriter, la primera impresora láser PostScript de bajo costo para el Mac, y del PageMaker, uno de los primeros programas de edición electrónica, fue lo que sacó a Apple del pozo en el que se había metido. Estos dos productos, en conjunto, hicieron del Mac la solución ideal para la edición de bajo presupuesto, y otra vez el Mac volvió a ser un éxito instantáneo.En 1987, Apple introdujo al mercado el Mac II. Concebida para ser expandible, el Mac II convirtió a la línea Macintosh en una familia de computadoras viable y poderosa. Apple fue de nuevo una acción favorita de Wall Street, que entregaba 50 mil Macs por mes. Parecía, en 1989, que Windows sería un fracaso y que Macintosh dominaría en la década siguiente.No fue así. En 1990 el mercado se saturó con clones de PC con todas las configuraciones imaginables, y Apple era la única compañía que vendía Macs. A fines de mayo, Microsoft presentó el Windows 3.0, que podía ejecutarse prácticamente en todos los clones de PC del mundo. Apple estaba en problemas.
La idea de los que conducían a Apple para encontrar una solución a este problema era dar en licencia el Mac OS (Sistema Operativo del Mac). También se hablaba de llevar el sistema operativo para que se ejecutara en máquinas con procesadores de Intel. Fue Michael Spindler, el nuevo COO (siglas de Chief Operating Officer o Jefe Operativo) de Apple, quien rechazó la idea, cuando dijo que era "demasiado tarde para dar licencias".A finales de 1991, Apple presentó la primera generación de PowerBooks, que fue un éxito de inmediato. También se había estado trabajando en un nuevo tipo de computadoras, el Asistente Digital Personal (PDA, siglas de Personal Digital Assistant), al que Apple denominó Newton. Sculley se interesó de inmediato en este proyecto, y lo dirigió hasta su culminación, en agosto de 1993. La primera generación del Newton tenía una función para el reconocimiento de la escritura de poca utilidad y no se vendió mucho.
Sculley comenzó a desinteresarse de las operaciones diarias de Apple y, finalmente, la Junta Directiva de Apple decidió que había sido suficiente. En junio de 1993, relevaron a Sculley de su posición como CEO y colocaron a Spindler en el puesto. Spindler, según todas las referencias, era el hombre equivocado para el trabajo. Poco dispuesto al trato personal, era casi imposible entrar a su oficina. Sin embargo, Spindler dirigió varios proyectos con éxito en sus dos años y medio como CEO.En 1994 Apple anunció la familia PowerMac, los primeros Macs que se basaban en el chip PowerPC, un procesador extremadamente rápido desarrollado en conjunto con IBM y Motorola. El procesador PowerPC le permitió a las Macs competir con la velocidad de los más nuevos procesadores de Intel y muchas veces superarlos.
Spindler también dirigió la cesión de licencias del Mac OS a varias empresas, entre las que se encontraba Power Computing, uno de los fabricantes más exitosos de clones del Mac. Pero muchos creyeron que Apple era demasiado restrictivo en sus acuerdos de licencias y apenas un puñado de compañías llegó a licenciar alguna vez el Mac OS. Pero el problema más grave de Apple no era la venta de computadoras, sino fabricarlas. En junio de 1995 Apple tenía mil millones de dólares en pedidos detenidos y no tenía los componentes para construirlas. A los problemas de Apple se les sumó, hacia el final del verano, el lanzamiento del Windows '95, que copiaba mejor que nunca la interfaz gráfica de usuario del Mac.
Apple tuvo la peor caída de su historia en el invierno de 1995-96. La empresa se equivocó al evaluar el mercado y lanzó Performas de bajo costo con procesadores PowerMac de mediana potencia, y no obtuvo rentabilidad alguna. Apple anunció una pérdida de US$68 millones en ese trimestre fiscal. En enero de 1996, se le pidió a Spindler la renuncia como CEO y fue reemplazado por Gil Amelio, ex-presidente de National Semiconductor.
Amelio realizó un gran esfuerzo para que Apple volviera a ser rentable, pero fue en vano. Luego de sus primeros cien días como CEO, Amelio anunció grandes cambios en la estructura empresarial de Apple. Esta se separó en siete divisiones y cada una fue responsable de su propio beneficio o pérdida. También se empeñó en mantener informados a los desarrolladores y a los usuarios sobre los asuntos diarios de la empresa. Aunque se anunció una terrible pérdida de US$740 millones en el primer trimestre fiscal de 1996, la pérdida se redujo a US$33 millones en el segundo trimestre, batiendo todas las estimaciones de los expertos financieros más acreditados. En el tercer trimestre, Apple tuvo una rentabilidad de casi US$30 millones, asombrando otra vez a los expertos en finanzas, quienes habían pronosticado una pérdida de ese tenor. Sin embargo en el cuarto trimestre Apple perdió mucho más que nunca.A finales de diciembre de 1996, Apple anunció que compraba a NeXT y que Steven Jobs regresaba al rebaño, noticia que estremeció a la industria. La división del Newton terminó convertida en Newton, Inc., una filial subvencionada en su totalidad por Apple.A principios de julio de 1997, Gil Amelio renunció a consecuencia de otra multimillonaria pérdida trimestral. Esto fue una sorpresa para casi todos, y en ese momento no se anunció un nuevo CEO. La Junta Ejecutiva consideró que, según informes recibidos, Amelio había hecho todo lo que podía por Apple. Mientras tanto, a Steven Jobs se le confirió, por el momento, un papel especial en Apple.
A principios de 1999, debido a fuertes ventas del iMac, que ya venía con nuevos colores, la participación en el mercado de Apple, llegó al 10 por ciento y el precio de sus acciones llegó al nivel más alto en muchos años. Tras haber logrado reflotar Apple, Jobs podía haber sido perdonado por regodearse. Alentado por sus empleados, en un balcón dentro de Apple, gritó "Aún tenemos un alma".
Desafortunadamente su empresa soñada había perdido la guerra hacía mucho y ninguna victoria moral lograría modificar ese hecho. La compañía de sus desvelos no lograría jamás recuperarse del todo. Jobs había realmente "puesto una marca en el universo", como lo había prometido hacía mucho tiempo.
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